08 enero 2019

Arteterapia


ARTETERAPIA
  

¿Qué es Arteterapia? ¿Cuándo surge? ¿Por qué?

Como lo expresa el término, es una disciplina que vincula el arte con la terapia, el arte con la cura, con la sanación; y, en un sentido más amplio, vincula a la persona con la realidad a través del arte. De esta manera, se propone una mejora en la calidad de vida de las personas, una posibilidad de relacionar el inconsciente con lo consciente, una posibilidad de producir cambios, de rehabilitar a las personas despertando y desarrollando capacidades bloqueadas o desconocidas.

A lo largo de la historia del hombre se han ensayado diferentes definiciones de arte (que no abordaremos aquí), que se corresponden a los diferentes momentos culturales por los cuales ha transitado la raza humana. Pero hay una cualidad o función del arte que ha permanecido desde los inicios: la comunicación.
Siempre hubo representaciones y de las más variadas: como sentimiento y como búsqueda, como conocimiento y como comunicación, como expresión y como reflejo de una realidad. La danza, el movimiento, el gesto, la pintura, la palabra, la música. Y como expresión: ¿Qué buscamos expresar? Emociones, miedos, angustias, alegrías, sueños, fantasías, el mundo que nos llena de intrigas, preguntas.


El Arteterapia, comienza después de la Segunda Guerra Mundial, cuando muchos afectados por los estragos de la guerra, se volcaron al arte como una manera de expresar el dolor y el miedo a la muerte. Poder expresarse y poder comunicarlo era una necesidad imperiosa. Y no se producía de manera aislada. Esto era fundamental. A partir de entonces, se amplía su aplicación a las psicopatologías, como parte del tratamiento terapéutico. No tiene nada que ver con los tests. Desde el arteterapia no se diagnostica ni se interpretan tests.

En Arteterapia sí importa el problema de la persona (sus conflictos, ansiedades, estados anímicos, etc.), porque el objetivo es encontrar, desde el arte, desde un proceso de trabajo artístico, soluciones a su situación personal, mejoras en su calidad de vida. Un complemento de esta disciplina, por lo dicho anteriormente, es el trabajo en equipos interdisciplinario; el vínculo entre el área artística, médica y de asistencia social.
 En la tarea del  arteterapista se debe tener en cuenta cómo intervienen y afectan los factores estéticos, tanto en el proceso de producción como en la obra terminada. En pocas palabras decimos que podría haber cierta exigencia de logros estéticos, pero no es el objetivo del trabajo. Hablamos también de “arte ocupacional”, que no debe confundirse con arte orientado al campo laboral.

Freud siempre sostuvo que la actividad artística de creación es una experiencia saludable, benévola para el psiquismo. Representa un triunfo sobre las fallas psíquicas y sus padecimientos, sobre la angustia y la destructividad.

¿Arte sano y arte enfermo?

Es conocido por los artistas la cualidad metafórica de sus obras; no todo está dicho explícitamente. Las metáforas que construye el artista psicótico no son equivalentes al delirio. Son creaciones estéticas que expresan visualmente lo que no puede ser dicho en palabras. El hombre primitivo, con su arte, logra la sustitución simbólica con la cual pudo invocar protección y evocar presencias durante la ausencia, es un arte mágico y ritual (recordemos los bisontes pintados en las cuevas). El arte del psicótico es a la vez un arte ritual, repetitivo y mágico y una investigación imaginativa y fantástica de su propia naturaleza interior y de la naturaleza de la materia.

Se produce un importante fenómeno: la desesperación y la violencia se elaboran creándose el espacio sagrado. En este espacio, la memoria y el estímulo nuevo, el recuerdo y el trauma pueden, a veces, dar nacimiento a una expresión artística. En la pintura, el artista psicótico encuentra el espacio sagrado donde elaborar su angustia. El pintor psicótico, sin proponérselo, realiza una investigación de su intimidad, de su sexualidad fantasmática, busca el sentido de sus experiencias psicóticas y logra verdaderos insights emocionales con la materia. Puede expresar el delirio, las alucinaciones, el autismo mientras que las intensas impresiones sensoriales que experimenta y que lo impactan estéticamente, le favorecen la apertura hacia un mundo que nunca conoció.

Los cinco sentidos tiene entre sí básicas y profundas correspondencias, pero todos, sin excepción, tienen la función de extender el cuerpo más allá de sus límites concretos. Esta expansión del cuerpo a través de la configuración de campos sensorio-perceptivos, es fundante de la comunicación humana: con los otros, consigo mismo y con la naturaleza.

El enfermo mental trabaja desde el lugar de “enfermo mental”, de “no artista”. Nos deberíamos preguntar ¿él quiere ser artista? No basta con el análisis de las obras, para darles la categoría de artísticas. En cuanto al análisis compositivo o estético, podrían ser semejantes a las de artistas consagrados. Y también hay obras producidas por artistas, que sólo fueron hechas como manifestación expresiva, descuidando cualquier otro aspecto que podría darle “valor agregado”. Lo cierto es que todos, todos, cuando realizan una producción artística, están comunicándose. Por eso, sería conveniente hablar de “EXPRESIÓN PLÁSTICA” o “EXPRESIÓN ARTÍSTICA”, y no obra de arte, para evitar polémicas o males entendidos con dicha expresión.


El taller de arteterapia

Se lo aborda desde tres ámbitos: el PEDAGÓGICO, el ESTÉTICO y el TERAPÉUTICO. Se desarrolla un proceso de trabajo artístico y se logra (o no) un producto, en un espacio determinado y un tiempo acotado. Al finalizar cada etapa deberá realizarse un cierre y una evaluación (con los registros obtenidos de cada encuentro). Cualquier nuevo proyecto deberá tener en cuenta el anterior, para poder dar continuidad a la tarea terapéutica.

Para poder definir las características del taller (objetivos-espacio-tiempo-actividades) es necesario realizar previamente un análisis institucional (características de la Institución y del ámbito institucional donde se va a trabajar, instalaciones y recursos, niveles de interrelación, organigrama, funciones y dinámica institucional, espacio físico y tiempo disponible) y un análisis del grupo participante del taller (psicopatologías, cantidad-edad-sexo, estables o ambulatorios, interrelaciones). Si bien es necesario conocer las características de enfermedad de los pacientes (para definir objetivos, tiempos, materiales, actividades, etc.) el trabajo se realiza apoyándose y desarrollando la parte sana de la persona. Nuestra propuesta de trabajo estará focalizada en desarrollar el campo perceptivo de los pacientes para mejorar sus niveles de comunicación interna y con el otro.

Para poder comprender los propósitos y beneficios del Taller de Arteterapia vamos a recuperar el concepto de RESCILIENCIA.

El mismo es tomado prestado de la Física y se aplica a la propiedad que tienen los materiales de volver a su estado original luego de haber sido sometidos a presiones y deformaciones. Y se lo aplicó a las Ciencias Humanas, vinculándolo a la ADVERSIDAD (una inundación, una catástrofe, la pérdida de un ser querido, etc.). ¿Qué es lo que hace que algunas personas puedan sobreponerse a lo adverso y otras no? ¿Qué hace que muchos de ellos aún salgan fortalecidos? Dice el dicho popular:    
“Lo que no mata, fortalece”

Se ha encontrado que, en personas afectadas por adversidades similares, hay factores comunes que contribuyen al mejoramiento o empeoramiento de la resciliencia. Son de origen histórico, biogenéticos, culturales; y los llamamos PILARES. Podemos reconocer PILARES FÍSICOS, PSÍQUICOS Y SOCIALES.
En la vida cotidiana, podremos reconocer personas acomodadas que viven de manera insatisfecha, sin potencial suficiente para salir airosos de situaciones conflictivas y otras “desgraciadas” que les hacen frente y salen recompuestas y fortalecidas.
Nombraré sólo algunos de los pilares que tienen íntima relación con el arte y con los vínculos:
o   Autoestima
o   Iniciativa
o   Creatividad
o   Independencia
o   Sociabilidad
o   Humor

La pregunta es:      ¿Puede la sociedad contribuir a mejorarla?

Claro que sí.
Estoy convencida que los pilares mencionados pueden desarrollarse de manera óptima desde el arte. Es decir, el arte sería una parte importante en el tratamiento terapéutico de los pacientes.


Profesora Diana Estrella Santos


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Agradezco tu comentario y recibir tu visita.